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domingo, 30 de enero de 2011

Para qué negarlo..




Se ríe de lo jodida que es la vida. Salta en cuanto la dicen algo y a la mínima se le cae el mundo encima. Hace que todo el mundo tenga siempre una sonrisa porque me gustaría que hicieran lo mismo por mí. La que cuando llora no se seca las lágrimas, porque aunque lo haga no se irán las penas. La que cuando tiene problemas no mira para otro lado porque nada cambiará. Soy orgullosa, demasiado a veces. Soy cabezuda. Mi felicidad es, bailar, cantar, reír. No se calla nada. Dice todo lo que piensa. La que se siente sola aunque este alrededor de miles de personas. La que a veces solo necesita a una persona al lado, de las seiscientas mil millones de personas que puede haber en el mundo. No pongo barreras a mi libertad y si las pongo las rompo. Soy incapaz de estarme quieta, hago muchas tonterías y me enfado muy deprisa, aunque se me pase muy rápido. Con el tiempo te acabarás dando cuenta de que soy muy caprichosa, no paro hasta conseguir lo que quiero y sobre todo soy muy borde, para qué negarlo. Hago lo que me sale del culo, digan lo que digan. Me equivoco, meto la pata, lo jodo todo, lo vuelvo a construir, hago el ridículo, lo dejo todo por un sueño…Vivo. Cojo cariño fácilmente a las personas aunque ni lo diga, ni lo muestre demasiado. Amo los pequeños detalles de la vida y de las personas. Son los que más cuentan. Me rabia que me manden callar, me sobrepasa. Cambio de humor al día tantas veces como parpadeo. Me encanta salir de fiesta y llegar a casa con cara de loca. Este tipo de persona me considero…

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